Esta ocasión vamos a explicar brevemente los principios fundamentales de la Ley Federal del Trabajo (LFT) es la columna vertebral del derecho laboral en México.
Desde su creación en 1931 y su posterior reforma en 1970, ha sido el marco regulador de las relaciones laborales en el país.
Su objetivo es establecer los derechos y las obligaciones de trabajadores y patrones, garantizando la justicia social y protegiendo la dignidad y los derechos fundamentales de los trabajadores.
En este artículo, exploraremos los principios fundamentales que sustentan la Ley Federal del Trabajo y que deben guiar todas las relaciones laborales en México.
1. Protección al trabajador
Uno de los principios más importantes de la LFT es la protección al trabajador.
Esta legislación parte de la premisa de que los trabajadores están en una posición de desventaja frente a los patrones, por lo que necesitan una regulación que equilibre las relaciones de poder en el ámbito laboral.
Este principio se refleja en diversas disposiciones de la ley, tales como:
Salarios mínimos: Establece que ningún trabajador puede recibir un salario menor al mínimo legal establecido, el cual se actualiza periódicamente para ajustarse al costo de vida.
Jornada laboral máxima: La ley establece límites a la cantidad de horas que un trabajador puede laborar diariamente y semanalmente para evitar abusos.
Seguridad social: Garantiza el acceso a instituciones como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), brindando servicios de salud, pensiones y prestaciones a los trabajadores.
2. Estabilidad en el empleo
La LFT busca garantizar la estabilidad en el empleo, protegiendo a los trabajadores de despidos injustificados.
Este principio se manifiesta en varios mecanismos, tales como:
Prohibición de despidos sin causa: La ley establece que un trabajador no puede ser despedido sin una causa justificada. Si un patrón despide a un empleado sin justificación, deberá indemnizarlo o reinstalarlo en su puesto, a elección del trabajador.
Indemnización y liquidación: En caso de despido justificado o cuando el trabajador decida terminar voluntariamente la relación laboral, se establecen claras reglas sobre las compensaciones que deben entregarse, como la liquidación y el finiquito.
Este principio tiene como objetivo evitar la precarización del empleo y fomentar que las empresas mantengan a su personal de manera estable, generando un ambiente laboral más saludable y productivo.
3. Irrenunciabilidad de derechos
Otro principio fundamental de la LFT es que los derechos de los trabajadores son irrenunciables.
Esto significa que un trabajador no puede renunciar a los beneficios que la ley le otorga, aunque firme un acuerdo con su patrón en ese sentido.
Este principio está diseñado para evitar que los trabajadores sean obligados a firmar documentos en condiciones de vulnerabilidad o bajo presión, renunciando a sus derechos legales.
Ejemplos claros de este principio son:
Salario mínimo: Un trabajador no puede acordar con su patrón recibir un salario inferior al mínimo establecido por la ley.
Horas extras: Aunque un trabajador acepte trabajar más horas de las permitidas por la ley, siempre tendrá derecho a recibir el pago correspondiente por las horas extras trabajadas.
Prestaciones mínimas: No es posible que un trabajador renuncie a prestaciones como aguinaldo, vacaciones o prima vacacional, ya que son derechos inalienables.
4. No discriminación e igualdad en el trabajo
La LFT establece que todos los trabajadores tienen derecho a recibir un trato igualitario y no discriminatorio, sin importar su género, raza, religión, edad, orientación sexual, estado civil, discapacidad, entre otros factores.
El principio de igualdad en el trabajo implica que:
Igual salario por igual trabajo: Los trabajadores que realicen la misma labor, en iguales condiciones de eficiencia y responsabilidad, deben recibir el mismo salario, independientemente de sus características personales.
Acceso a oportunidades: Los trabajadores tienen derecho a acceder a oportunidades de ascenso o promoción en función de sus capacidades y desempeño, sin ser discriminados por motivos ajenos a su labor.
La protección contra la discriminación también se extiende a medidas específicas para proteger a grupos vulnerables, como las mujeres embarazadas, a quienes se les otorgan licencias de maternidad y se les prohíbe realizar trabajos peligrosos o insalubres.
5. Libertad de asociación y sindicalización
La LFT reconoce el derecho de los trabajadores a asociarse libremente para defender sus intereses laborales.
Este derecho incluye la posibilidad de formar sindicatos, federaciones y confederaciones, así como participar en la negociación colectiva de condiciones laborales.
La libertad sindical incluye varios aspectos clave:
Formación de sindicatos: Los trabajadores tienen derecho a formar sindicatos sin necesidad de autorización previa por parte del patrón o del gobierno.
Derecho a huelga: La LFT protege el derecho de los trabajadores a suspender labores mediante la huelga cuando consideren que sus derechos están siendo vulnerados, siempre que se cumplan los requisitos legales.
Negociación colectiva: La ley permite la negociación de contratos colectivos de trabajo entre los sindicatos y los patrones, lo que da lugar a la mejora de condiciones laborales más allá de los mínimos establecidos en la ley.
6. Trabajo digno y decente
La Ley Federal del Trabajo está inspirada en la idea de que todo trabajador tiene derecho a un trabajo digno y decente.
Este principio, alineado con los convenios internacionales de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), implica que el empleo debe ser seguro, respetuoso y cumplir con los estándares mínimos de condiciones laborales. Un trabajo digno incluye:
Condiciones seguras e higiénicas: Las empresas deben garantizar que el entorno laboral esté libre de riesgos para la salud y seguridad de los trabajadores. El incumplimiento de estas condiciones puede derivar en sanciones graves para el patrón.
Remuneración justa: El salario debe ser suficiente para satisfacer las necesidades básicas del trabajador y su familia, además de incluir prestaciones adicionales como el reparto de utilidades, vacaciones y aguinaldo.
7. Participación de los trabajadores en las utilidades
La LFT establece que los trabajadores tienen derecho a participar en las utilidades generadas por la empresa.
Este principio busca reconocer el aporte del trabajo en la generación de riqueza y redistribuir los beneficios entre los empleados.
Las reglas generales para la participación en las utilidades son:
Porcentaje de participación: El porcentaje de utilidades a repartir es del 10% de la renta gravable de la empresa, según las normas fiscales mexicanas.
Excepciones: No todas las empresas están obligadas a repartir utilidades, como aquellas de nueva creación, instituciones públicas o empresas que por su actividad principal generan un monto reducido de ingresos.
8. Principio de continuidad
Este principio implica que la relación laboral entre el patrón y el trabajador debe mantenerse siempre que sea posible, buscando que los trabajadores no sean despedidos sin causa justificada.
Además, promueve que la relación laboral sea de carácter indefinido, a menos que se trate de trabajos temporales con una duración claramente especificada.
Conclusión
La Ley Federal del Trabajo en México es un instrumento clave para garantizar la equidad y justicia en las relaciones laborales.
Los principios fundamentales que la rigen no solo buscan proteger a los trabajadores, sino también promover un entorno de trabajo seguro, equitativo y respetuoso.
Conocer estos principios es esencial para trabajadores, patrones y especialistas en derecho laboral, ya que proporciona las bases para una correcta interpretación y aplicación de las normas laborales en México.